Los ejes de nuestro modelo pedagógico

Contenidos: Los contenidos curriculares se trabajan a través de proyectos y centros de interés que incluyen un enfoque interdisciplinario. Las actividades planteadas en los centros de interés y/o proyectos están contextualizados en las propias experiencias, motivaciones y necesidades del niño, por este motivo el aprendizaje es significativo.

Arquitectura del aula: Generamos un clima emocional positivo en el aula, que es muy importante para facilitar el aprendizaje. Pero junto a esto, de acuerdo con la naturaleza social del ser humano, también es muy importante el entorno físico que permita la necesaria interacción entre los alumnos.

Fomentamos la conducta cooperativa. Cooperar, en lugar de competir, mejora el aprendizaje en el aula. Por lo tanto, cambiamos la organización y disposición de las aulas, mesas, sillas, ubicación del profesor,.. permitiendo la imprescindible interacción entre los alumnos.

Estamos construyendo una comunidad de aprendizaje; abrimos las puertas del aula al exterior, es decir, cualquier espacio de la escuela es un rincón de aprendizaje, los alumnos de diferentes edades comparten espacios y conocimientos, los profesores colaboran, las familias participan y se crean vínculos con el mundo real. Somos una comunidad de aprendizaje construida entre todos. Damos mucha importancia a la participación activa de las familias y a las actividades interciclos.

Metodología: El alumno es el protagonista activo de su aprendizaje. El profesor los plantea retos y proyectos que van fomentando su autonomía y creatividad. El profesor los acompaña, crea situaciones en las cuales los niños tengan que formular hipótesis, los ayuda en la resolución de sus dudas y en la elaboración de sus propias conclusiones. A nivel afectivo y emocional los anima y refuerza positivamente en todos sus logros y para lo cual, nada mejor que utilizar las enormes oportunidades que las herramientas educativas nos ofrecen, como por ejemplo las tecnologías digitales, los materiales elaborados por la escuela, adecuados al grupo clase…

Lo importante es el proceso, no el resultado, por lo cual hacemos especial hincapié en la enseñanza de las llamadas funciones ejecutivas del cerebro, aquellas que nos permiten planificar y tomar decisiones adecuadas como el autocontrol, la memoria de trabajo (memoria a corto plazo que utilizamos al leer o reflexionar) o la flexibilidad cognitiva.

El aprendizaje se facilita a través de los retos, de la curiosidad, de lo inesperado. Y, por eso, utilizamos juegos o tecnologías digitales con objetivos de aprendizaje definidos. Porque la incertidumbre asociada al juego y el feedback generado durante este, activan el sistema de recompensa cerebral del alumno motivando y facilitando así su aprendizaje. El componente lúdico y el ejercicio físico resultan muy importantes.

Memoria y aprendizaje: Está claro que no hay aprendizaje sin memoria pero hacemos un uso adecuado de la misma, sabiendo que la memoria es selectiva y que la emoción es la clave para recordar aquello que se aprende. El aprendizaje es el conjunto de todas las vivencias y experiencias adquiridas durante un periodo de tiempo y que el niño guarda en su interior como un tesoro.

Evaluación: En la escuela se considera a cada niño único y diferente y por tanto la evaluación de su aprendizaje tiene que tener en cuenta su propio desarrollo madurativo por el que hay que considerar una gran variedad de aspectos como su esfuerzo personal, su participación. Los objetivos de aprendizaje individuales son los indicadores del progreso personal.